- Profundidad Máxima: 22 m
- Dificultad: Media
- Corrientes: Leve/Moderada
- Titulación mínima: OWD/AOWD
La cara sur de Cerro Gordo está formada por una impresionante pared vertical. En estos acantilados de gran desnivel encontramos una gran hendidura esculpida en la roca que va a ser nuestra referencia para bajar. A 8 metros de profundidad nos detenemos unos minutos en un primer “bancal” de los que vamos a encontrar conforme descendemos. Aquí podemos avistar morenas, congrios y muriones que van a ser frecuentes en toda la inmersión. Seguimos descendiendo por la montaña submarina; a partir de los 15 metros nos sorprende una gran densidad de tres colas. Es habitual el avistamiento de especies “bioindicadoras” de la calidad del entorno como grupos de Burritos listados, Borriquetes y Corvallos. Nos encontramos con enormes piedras de desprendimiento con multitud de cuevas y cavernas; es éste el territorio ideal para los meros, algunos de gran tamaño con más de 20 años.
La profundidad máxima de la inmersión es 22 metros, hay alguna gran piedra separada de la pared con bonitas gorgonias y donde se suelen avistar peces Luna. Vamos a ir avanzando con la pared a la derecha, rumbo Oeste. En las pequeñas cuevas y cavernas encontramos Tembladeras, Brótolas y Pulpos de gran porte. Llegamos a una zona de arena muy fina donde es frecuente avistar peces Limón (Seriolas) y Águilas marinas. Un poquito más adelante, con una profundidad de 14 metros, numerosos Abadejos. La inmersión termina cerca de La Cueva de las Palomas; estaremos varios minutos a unos 5 metros de profundidad disfrutando del tapiz coralígeno de la pared que nos aporta un paisaje sublime.